Biología

Taller ‘Como un huevo a una naranja’

Este proyecto se expuso en
Encuentro Alumnado Investigador de la Provincia de Cádiz
El Puerto de Santa María, Cádiz

Autores

Myriam Quijada Sánchez y Diego Castellano Sánchez son profesores y miembros de EUREKA, la asociación de docentes que coordina el Encuentro Alumnado Investigador de la Provincia de Cádiz. Esta feria forma parte de la Red de Ferias de la Ciencia de Fundación Descubre.

La célula es la parte más pequeña de un ser vivo. Seguramente lo  sabrías, pero…

¿Sabes que podemos ver células sin usar un microscopio? ¿Te imaginas dónde?

Las células tienen forma, estructuras y tamaños muy variables. Aunque tenemos la idea de que son muy pequeñas, y sólo podemos verlas con un microscopio, en realidad hay muchas que se pueden observar a simple vista. No hay más que mirar al trasluz la fina membrana que separa las capas de una cebolla, o la pulpa de un naranja. En ambos casos se puede observar como las células se colocan formando grupos organizados.

Pero hay también células de tamaño enorme, como son los huevos de los avestruces, que pueden presentar hasta dos kilos de peso. En general, los huevos de las aves son tan grandes porque su función es tener espacio y alimento suficiente para permitir el desarrollo del  embrión en caso de fecundación.

En el huevo de gallina, la yema corresponde a la célula, mientras que la clara constituye la sustancia de reserva para que se desarrolle el pollito.

La cáscara sirve de estructura de protección y evita la deshidratación del embrión.

Vamos a experimentar con un huevo y una naranja para observar células animales y vegetales, así como las partes que las constituyen.